lunes, 25 de abril de 2011

Cuestionario De Los Bibliófilos

Bueno, así como lo ha puesto Cronista en su blog, he aquí mis respuestas al "Cuestionario de los Bibliófilos".

El último libro que he leído: El Honor del Samurai (Takashi Matsuoka).

Un libro que cambió mi forma de pensar: Tierra de Dragones (James A. Owen).

El último libro que me hizo llorar: Despedida (Claudia Gray).

El último libro que me hizo reír: Elliot y el Retorno de las Momias (Joaquín Londáiz Montiel).

Un libro prestado que no me han devuelto: Nunca presto mis libros.

Un libro prestado que no he devuelto... todavía: Wuthering Heights (Emily Brontë) Si, está en inglés.

Un libro que volvería a leer: Supongo que son demasiados, aunque por ahora estoy volviendo a leer la saga de Harry Potter.

Un libro para regalar a ciegas: El Laberinto de la Rosa (Titania Hardie).

Un libro que me sorprendió para bien: Narraciones Extraordinarias (Edgar Allan Poe).

Un libro que robé: Nunca he robado un libro.

Un libro que encontré perdido: Tampoco me he encontrado un libro perdido.

El autor del que tengo más libros: Hay un empate entre J. K. Rowling, Stephenie Meyer, C.S. Lewis y Laura Gallego.

Un libro valioso: Si con "valioso" se refiere a que tiene la firma del autor, entonces sería Vampyr de Carolina Andújar; si con "valioso" se refiere a valor sentimental diría que la trilogía de Memorias de Idhún.

Un libro que llevo tiempo queriendo leer: El Cantar del Mio Cid.

Un libro que prohibiría: María (Jorge Isaacs). No es que tenga nada malo, pero es un libro demasiado aburrido para que sea de lectura obligatoria en el colegio.

El próximo libro que voy a leer: Tengo dos en la lista de espera, Tormenta de Kate Lauren y Despertar de Claudia Gray.

jueves, 14 de abril de 2011

Faltan 15 Minutos Para Salir A Recreo

La entrada la escribí esta mañana en el colegio en clase de... Bueno, más adelante se dan cuenta.

Y estoy aquí escribiendo otra entrada... Se supone que estoy en clase de cálculo, y juro que al principio de cada clase trato de poner atención, pero ¡es imposible!

Pasado un rato sólo escucho palabras aisladas como: "derivada", "inversa", "gráfica", etc... Mientras tanto, yo leo, escribo y observo.

¿Qué se puede observar en una clase de cálculo? Obviamente, el tablero no, puesto que está lleno de lo que yo llamo: Contaminación visual; tampoco puedo mirar más allá de la ventana, no es un gran paisaje: un par de edificios; lo que hacen las demás tampoco es muy interesante: unas hacen como que ponen atención, otras dibujan, hablan, comen y, sólo una de verdad sabe de qué está hablando el profesor.

Tal vez lo único medianamente divertido para observar sea el reloj (mmm... ahora faltan 3 minutos) pero sería un suplicio mirarlo los 50 minutos que dura la clase, así que... sólo queda simplemente observar y escribir.

(Y ahora faltan 2 minutos... ¡qué lentitud!)

Espero que el timbre suene a tiempo, de lo contrario, tendré más minutos para simplemente observar.

Corazón Blanco

Si, esta entrada va de fútbol, pero no cualquier fútbol. Será sobre los 20 días más intensos que ha vivido el fútbol español desde 1916. ¿Quién diría que tendríamos cuatro clásicos Real Madrid - Barcelona en tan poco tiempo?

Podría decirse que los números y cifras históricas están a favor del Real Madrid; sin embargo, el Barcelona tiene un juego espectacular y lo ha venido demostrando.

A pesar de todo, el Real Madrid no se queda atrás, su juego en equipo y sus individualidades los convierten en un peligroso equipo que no se rendirá ante nadie.

Estos cuatro clásicos consecutivos serán una prueba, no sólo física sino mental, para los jugadores de ambos equipos. La derrota en algún encuentro podría repercutir en su rendimiento en el siguiente partido, y así, tres veces más. Si no quieren desmoralizarse y acabar hundidos por el contrario, los jugadores tendrán que demostrar confianza y seguridad ante el panorama que se les presenta.

Hablo como madridista cuando digo que confío e mi equipo, confío en sus habilidades y su capacidad para vencer al rival más poderoso al que se podrá enfrentar. No pierdo las esperanzas ante lo que el futuro depara.

Sé que mi equipo irá a la Cibeles a celebrar tres títulos esta temporada.

Llámenme como quieran, pero este es el sentimiento de alguien con corazón blanco.

¡Hala Madrid!